Como Barcelonés en el álgido destello precedente del "objetivismo", (corriente musical de la que todo ejecutante de la época erigía su carrera hacia el renombre clásico patrio), es bien sabido que Mompou estudió en España, fuera de los márgenes impuestos, eludiendo las colaboraciones del entorno compatriota, hecho que suscitó un carisma innato que difícilmente es confundido.
Su primera obra "Impresiones íntimas" se publica en parís, entre 1911 y 1914, fomentada en su día por "Émile Vuillermoz", acérrimo divulgador del periodismo musical que vivificaba el novísimo "impresionismo"... en su quehacer de pesquisa, contractaba hacia la carga elocuente del influjo por parte de "Gabriel Fauré", haciendo de ello, numerosas citas sucesivas, destinadas a sus artículos periodísticos esenciales;
¿Su música?, claramente basada en piezas populares, por así decirlo "nacionalistas", hallando en el poema de San Juan de la cruz, su tótem sustancial, primordial vínculo a la "armonía callada", pero íntegramente diverge su punto de interpretación en un preclaro desdeño ante cualquier similitud entre facciones armónicas... es decir, único en su materia objetiva, de gran dote carismático que lo relevan en esta nuestra acostumbrada España, a un espacio de menor radio.
Impresionismo minimalista bajo un rico acervo de duende y color, todo ello y mucho más remarcan sus preludios armónicos, íntegros destinados al ámbito pianístico con intrínseco sentimiento de añoranza y melancolía.
Lista de canciones;
1-I (0:57)
2-II (2:11)
3-III (0:35)
4-IV (1:38)
5-Pájaro Triste (2:43)
6-La Barca (1:46)
7-Cuna (3:13)
8-Secreto (2:28)
9-Gitano (2:28)